Cada vez que me mira, mi mundo se ilumina, su mirada me hace sonreír sin cesar,
y mi corazón palpita con fuerza divina, consciente de que el amor es mi único lugar.
En su presencia, siento una prisa emocionante, un latido acelerado que no puedo controlar,
me hace sentir viva y desbordante, y en cada instante, el amor puedo abrazar.
Es en sus ojos café que encuentro la magia, un reflejo del amor que nos une sin final,
y en su sonrisa, la dulzura que me contagia, haciendo que mi mundo sea simplemente especial.
Sos mi inspiración, un regalo divino,
un lazo tibio que emana cariño .
Te quiero, te quiero