Garabateado rosal
Mujer pionera de la Santa Esfera
caminante campante y sonante
de la primera a la quinta dimensiòn
Garrafal rosal en su pedestal se desliza al andar
Mismo discurso, misma creencia
de sonrisa coqueta,
concubina predilecta
màscara perfecta proyecta la nena
En la vasta mar, la realidad la exaspera
Mientras la ola que pega se agota en la espera
del pètalo colorido que cae en la ladera
del rìo dormido
Agasajado el reflejo de la mártir
Severos y secos son sus labios
Mientras despiertan las hojas, revientan la hora
y explotan la gota.
Fluye la mar,
la mejilla està rota
la garganta pesada
se queja indignada
En tanto suave cabellera
tendida al viento
se pierde en el tiempo
de un lamento
Y el dolor latente y potente
cantarà melodìas y sinfonìas
en sus dìas de nostalgia
por ser galeote naufragante corazòn
En sus manos y en su piel
lleva el peso del garrafal rosal
que se esconde sin màs
en la vasta humanidad
Dejando al niño dormido
se desliza en su miseria
temeroso y cautivador
tèrmino
¡No dejes que fluya y expanda
el dolor, que de tì depende un corazòn!
Apacigua al niño tibio minino
cambiante menguante
lleno y sonante
Que proposito tiene
y tarea ha de realizar
enmendar el error de la madre
que solo él puede sobrellevar.