Un baladista italiano,
un beso tras una flor,
una profunda mirada,
tus labios y nuestro amor.
Una góndola navega,
el gondoliere cantando,
escuchando bellas letras,
allí nos vamos besando.
Se advertía entre canales
que el amor iba pasando
en la Piazza de San Marco,
pude ver que ibas llorando.
Por ti, por mi, por la vida,
por días llenos de poesía,
por todos esos momentos
que nos llenan de alegría.
Una extraña sensación
sentimos al pisar sus calles,
allá te envuelve el amor,
te halles donde te halles.
Classman