De regreso a mi hogar, tierra natal,
donde la esencia de mis raíces se funden,
donde el aire sabe a memorias vivas,
donde cada rincón me llama con cariño.
Bajo el cielo de mi infancia vuelvo,
y encuentro en cada calle un recuerdo,
en cada brisa, un abrazo antiguo,
en cada sonrisa, un lazo eterno.
Oh, tierra amada, Quisqueya mía,
en tus valles y montañas revive
el latido que siempre me guiaba
hacia el regazo de tu amor inmenso.
Aquí, en este suelo que me vio nacer,
me reconozco, soy parte de tu ser,
y aunque lejos viajé en busca de más,
sé que aquí siempre encontraré mi paz.
Eres mi fuente de origen y destino,
mi refugio, mi arrullo, mi camino,
te amé en la distancia y al regresar,
te amo más, mi tierra, sin cesar.