Brian Carmona

FUGITIVOS

 

En un rincón oculto del universo,

dos almas se encuentran en un lazo inmenso.

Se aman en silencio, sin poder mostrarlo,

pues las circunstancias no les permiten lograrlo.

 

Él le susurra palabras de aliento al oído,

prometiéndole que juntos superarán el olvido.

\"Lo gritaremos al viento\", le dice con pasión,

\"nuestro amor vencerá cualquier prohibición\".

 

Ella a veces duda del destino incierto,

pero su amor por él es como fuego abierto.

Aunque el camino sea oscuro y largo,

juntos desafiarán cualquier embargo.

 

En las noches de estrellas, bajo el manto celeste,

se prometen amor eterno, sin temor a éste.

Aunque el mundo los mantenga en el inframundo,

en sus corazones arde fuego de un amor profundo.

 

Se comunican en susurros clandestinos,

entre miradas cómplices y suspiros divinos.

Aunque la vida les ponga obstáculos en el sendero,

su amor se fortalece porque es verdadero.

 

“Mientras la luna y el sol estén enterados,

ni al Dios del mundo le rendiremos resultados”.

Él la abraza, ella lo mira, y se funden en un beso,

“¡Te sientes tan seguro bajo un amor inmenso!”

 

En cada amanecer, renuevan su promesa,

de luchar por su amor con firme entereza.

Aunque el futuro sea incierto y sombrío,

de la mano enfrentarán cualquier desafío.

 

Así, en la penumbra de la noche sus miradas,

como dos diamantes en el filo de sus espadas,

chocan en el silencio pero con la certeza,

de que su amor será su mayor fortaleza.