Anoche te soñé,
Caminando nos encontramos, sublime como siempre, como aún te recuerdo, vestido color vino, con un poco de flores.
Al chocar de frente mi mano rodero tu cintura, mientras la otra acaricia tu cara, te robe un beso, un beso que me correspondíste. No fue largo, pero fue mágico e intenso. Ahí se detuvo el tiempo y volví a estar completo después de mucho tiempo. Después de años después de tanto confirmo que aún te amo.