Ame desde el día en que te vi.
Ame tu barbilla sin igual
Tu sonrisa tímida al mirar
Tu voz de pequeña al escuchar.
Nací, esa tarde en que te conocí
Observe un pueblo naciente y bello,
Mire nacer de tus ojos la flor de la inocencia
Y tuve miedo de apoderarme de ella.
Ame...
Y los pájaros del crepúsculo
Con su canto diabólico me alejaron
Llevándome a la noche, donde tus recuerdos me abandonaron.
Ame...
Y quise ser el sol
Para estar donde quiera
Para acariciarte cuando frió sintieras.
Ame...
Como la cristalina agua de la fuente
Y me reflejo ella, el iris de tus ojos bellos
¡Como quise estar ante ellos…!
Ahora, me encantaría decir que te amo
Pero solo soy, el viento sin respuesta
Un maniquí que responde a la soledad
Una maquina sin combustible.