No han de moverme las fuerzas
ni las ganas de quererte,
que si tu amor, no me viene
lucharé porque me quieras,
me querrás, eternamente.
Porque te ofrezco este amor
que está lleno de locuras,
y por si aún tienes dudas
te ofrezco mi corazón
y mis caricias, son tuyas.
No me muevo, aquí me tienes
esperando tu respuesta,
intentando que me quieras
a pesar de que no quieres,
no han de moverme las fuerzas.
Que tu amor, lo quiero mío
que tu cuerpo, me encadena
y que noto escalofríos,
cada vez que te me acercas
o pasas al lado mío.
No han de moverme las fuerzas
de que sepas que te quiero,
que lucho por que lo entiendas
y que me puede el deseo
de quererte, aunque no quieras.
Que a la salida te espero
callado, sobre la acera
al salir, no te lo esperas
no han de moverme mis fuerzas
por decirte lo que siento.
Y me miras sonriendo
con la cara de inocencia,
y te miro... y hasta tiemblo
si noto que te me acercas.
Pero aquí me tienes
y espero....
y hasta mi, despacio llegas
para decir lo que quieres.
Que no te muevan las fuerzas
si tú quieres, estoy dispuesta
también siento lo que sientes
y mi amor, también te espera.
Y que si tiemblas o tiemble
he esperado a que decidas,
si me acerco, si te acercas
si este amor de verdad quieres,
te espero para que vengas
para entregarte mi vida.
Que han sido muchas miradas
y palabras sin decirlas,
tantas caricias pensadas
que parecieron mentiras,
si de verdad las sentías
porque dudaste en darlas?
Pero aquí estoy, ya ves¡
para darte mi respuesta,
y mi respuesta es si
también quiero que me quieras.
También tiemblo si me miras
y si te cruzas muy cerca,
también me muerdo la lengua
esperando a que decidas
acercarte, y no te acercas.
Pero entiendo que te pasa
y el miedo que te atormenta,
por eso soy quien se acerca
temblando, pero serena
para saber lo que piensas.
Que no me muevan las fuerzas
para poder contestarte,
que lo que siento es tan grande
que el pecho me lo revienta,
por el deseo de amarte.
Y que mi boca ahora tiembla
y los ojos, se me encienden,
y ese amor que ahora quieres
te lo doy, con mucha fuerza
cógelo, te pertenece.