Paso las noches en vela,
fumando y añorándote.
Esperando tu regreso,
como el sol espera a las estrellas,
sin saber si volveré a verte.
Cada noche vienes a mis sueños,
entre risas y lágrimas,
clavando tus espinas en mi pecho,
haciéndome quererte más y más.
Tus ojos azules, antes cielo claro,
tienen otro brillo cuando estás a mi lado.
Tu pelo, tus ropas, huelen a otro hogar.
Tus labios, antes refugio de mi amor,
me niegan, se alejan de los míos.
¡Sé que tienes otro amor!
Un velo de dolor cubre mi corazón,
mi alma se hace añicos, como frágil cristal.
Has apagado la llama que nos unía,
la llama que ardía con pasión en tu interior.
Ahora solo queda el vacío y la desolación,
un frío silencio que me hiela por dentro.
Siento que el mundo se derrumbara a mis pies,
y no hay nada que pueda hacer para evitarlo.
Ahora, solo te pido un favor:
Vete y llévate tu amor.