Salve ¡Oh! Maestro que da movimiento
Abeja productora. Luz de historia.
Emblema de martirio y de victoria.
Dominador del yunque, fragua y tiento.
Noble cincelador del monumento
que por temple tu afrontas astro y gloria
desde tu pensamiento y tu memoria
compartes al mundo de tu andamiento.
Salve, ¡Oh! tozudo obrero del arado;
gran soldado de la hoz y del sembrado.
Centinela de hazaña innumerable.
¡Salve al martillo que tu mano empuña!
¡Salve a tu mano que todo lo acuña!
Eterno luchador, sagaz y amable.
©PabloAlfonso 2010