Todo el que promete algo
tiene que ser responsable,
para que infunda respeto
y que de el bien se hablé.
El que vive prometiendo
y nunca puede cumplir,
nadie lo quiere de amigo
porque es hábil para mentir.
La persona irresponsable
siempre será rechazada,
porque vive de la mentira
y nunca cumple con nada.
El honesto y responsable
goza de gran admiración,
porque todos los respetan
y confían sin condición.
Todo el que es irresponsable
con eso jamás nada gana
y nadie confiará en el
porque tiene mala fama.
El irresponsable siempre cree
que es muy hábil y astuto,
pero su gran cualidad
es la de estúpido y bruto.
Alejandro Díaz Quero
Villa de Cura,17/01/2024.