La nieve adorna hoy el lecho que ocupas, compañera.
Lienzo blanco para alimento de la melancolía de un réquiem
Ay de Paseos sin luna y con tu ausencia.
Vacío que crece en mí sin tu presencia´
Mil sonrisas con aleteo de mariposa
me acompañan al recordarte.
Cuanto cariño mana de este corazón cansado.
Pequeños lagos salados se desbordan
Por las torrenteras que el tiempo tallo en mi rostro.
Añoranza del sosiego de tus ojos castaños.
Dorada amiga mía.
Volveremos a pasear entre nubes.
Robaré diminutas estrellas a la noche,
Hasta saciar tu glotona naturaleza.
Y volveré a abrazarte como el día que te fuiste.
Ya por siempre compañera.