Carlos Eduardo
Recientemente
\"Converso con Dios, le hablo, le cuento que
me acuerdo de él, me acuerdo en la oscuridad
y a veces cuando aparece el día
Después de muchas peroratas.
Después de hablarme demasiado a mí mismo.
Quizás no sea exactamente Dios.
Quizás solo sea su rara penumbra.
O su aliento que se escucha por la noche,
su aliento que hace que el gato de la esquina sospeche.
O que todo se vuelva tenebroso,
como una infinita pista de hielo.
Quizá sea Dios sin más, quizá
solo sea su recuerdo.
del país de la última tarde.\"
Autor desconocido
He instalado un taller de sueños,
los primeros los he regalado,
eran relámpagos motivadores
para generar sueños propios.
No me he puesto limitaciones,
pueden ser realizados, vívidos,
experimentados despiertos o dormidos,
para un instante o una eternidad.
El sueño mismo guía.
Puede ser un colibrí cantando una canción de cuna
a los pies de una princesa esperando su primogénito
mientras el príncipe azul sonríe.
Todo se reproduce en distintos medios,
emocionarse es fundamental,
así selecciono los destinatarios de estos
obsequios.
Tengo una colección ya de ellos,
aquí los daré a conocer,
algunos,
más adelante.
Gracias.