Me gusta tu sonrisa
igual que tu mirada;
tus ojos, porque miran,
con los ojos del alma.
Me gusta tu presencia
igual que tus caricias
tus manos que son tersas
y frescas como brisas.
Me gustan tus palabras
que son muy cariñosas
tan suaves como lana
y aromas de amapolas.
Me gustan esas manos
si suave ellas me tocan
y siento que volamos
igual que las gaviotas.
Me gusta ese suspiro
que sale de tu pecho
intenso como el lirio
que en el jardín tenemos.
Me gustan esos labios
tan suaves en tu boca
y más si nos besamos
tendidos en la alfombra.
Me gustan esos besos
que saben a frambuesas
y a dulce coqueteo
del viento con las hiedras.
Me gusta ver tu pelo
con hilos color plata,
jugando con el viento
en las frescas mañanas.
Y tus pestañas crespas
que mueves con lisonja
con la mirada intensa
que se vuelve amorosa.
Me gusta estar contigo
mirando el firmamento
con tu pelo tendido
aquí sobre mi pecho.
Me gusta ir de paseo
al mar o la montaña,
tener muchos recuerdos
muy dentro aquí del alma.
Me gusta que te gusten
los versos que te escribo,
me gusta que me busques
cuando tú sientes frío.
Me gustas por tus luchas
pujando por justicia
y nuestras almas juntas
en pos de su conquista.
Me gusta la ternura
que anida ahí en tu piel,
me gusta que deslumbras
¡Belleza de mujer!