En nuestra mente poseemos abismos
Desde ellos duerma o despierta una voz llamativa
La información que llega hacia nosotros y a la vez también es creada
Es el alimento para las necesidades de aquellas voces
También hay alimento que se digiere con el tiempo
Alimento que posteriormente se perderá
Algunas veces no sabemos ni entendemos cómo
Pero noa descubrimos inapetentes
Esto no será jamás un poema
Porque tampoco soy un ser humano
Ni una mano que escribe
No sé ni siquiera dónde estoy
O quién me trajo hasta aquí
Solo intento e intento
Entender esta impaciencia y esta incomodidad
Qué me motiva a escribir
Si soy esqueleto, músculos y nervios
Nada está calculado
Y estamos dispuestos a entregar ese disque bien de los templos
Por probar otro cáliz