Sofía, Sofía, llevas así ya 3 días,
tus ojos parecen haber secado,
aunque tu corazón, no entienda de analogías.
Sofía, Sofía, te lo digo porque sé que en mi confías,
la suerte es relativa, así como el amor,
no son contraparte, son uno mismo junto al dolor.
Sofía, Sofía, continuarás escribiendo tu biografía,
y ten por seguro que habrá más capítulos de amor,
y estarán escritos con sonrisas y con un mejor humor.
¡Que bendición es mirarte sonreír!
Cuando menos, así lo es para mí.
Ojalá me miraras con otros ojos,
unos que tuvieran menos dolor,
te lo juro, ¡Es tan lindo su color!
Sofía, Sofía, a veces el destino así nos desafía,
pero no hay mal que dure cien años,
y a veces vienen bien los desengaños.
Sofía, Sofía, si te gustara leer filosofía,
nos distraeríamos platicando,
en el universo que más tengo dominado.
Sofía, Sofía, Tu nombre en griego es sabiduría,
y tu sabrás mejor como sanará tu corazón,
nunca fui bueno dando consejos, ni teniendo la razón.
Pero aquí estoy querida Sofía,
¡Que bendición es mirarte sonreír!
Cuando menos, así lo es para mí,
y en tus ojos se irá diluyendo el dolor,
te lo juro, ¡Es tan lindo su color!