¡Ah! La enfermedad X, invisible y astuta,
un rumor en mi cuerpo, ¿será cierto?
Aún no hay noticias, pero yo ya siento
los síntomas, ¡qué intriga tan bruta!
Quizás mañana los titulares mutan,
y en los noticieros empiece el cuento,
del mal desconocido y virulento,
que en mi interior ya se disputa.
Espero ansioso la confirmación,
mientras mis síntomas hacen su danza,
la enfermedad X, ¡qué sensación!
Quizás sea famoso por mi rara herencia,
el primer caso de esta extraña pitanza,
o solo una indigestión de mi conciencia.