Son las 6 de la mañana
del sábado 9 de marzo.
La gran noticia
es que llueve sobre mojado.
Llueve intensamente,
Con oficio, sin reparo.
Llueve para todos los gustos,
Para todos los campos,
Para todos los pozos ,
para todos los pantanos, llueve.
Debe de haber estado lloviendo toda la noche,
como antiguamente,
a bocajarro.
Los charcos alrededor de los árboles son abundantes y generosos,
delatan la noche de borrachera.
Llueve con impaciencia pero sin prisa, incluso con ternura, como haria el amor un guerrillero después de estar en el monte mucho tiempo, camarada.
Llueve sin hacer ruido en la ventana.
Llueve con alegría de fiesta anticipada.
Llueve y no estoy soñando.
Sencillamente llueve sin complejos y con descaro,
Como tiene que llover
después de un maravilloso 8 de marzo.
Alfonso Torres.