Moyilin

Días Buenos, Días Malos

Entre el silencio, la distancia y el tiempo, hay días grises y hay días que parecen claros, pero todas las noches siguen siendo horribles. Los domingos siguen siendo domingos de vacío. Los lunes son de desearte una bonita semana. Los martes son de ver tus fotos o vídeos que encuentro predios entre las redes. Los miércoles son de escribir un poema inspirado en alguna canción que suena en mi alma. Los jueves son de querer empezar a soltar. Los viernes recojo tus recuerdos y me vuelvo a enredar, recuerdos qué llevo, que pesan y queman el corazón, recuerdos qué a veces callan y solo me abrazan, otros me dejan volar y otros me ahogan. Los sábados son de preguntarme como es que ya soltaste si duele tanto. Y así cada semana desde que no escucho tu voz, desde que no se de tus días, desde que no se tus sentimientos.

 

Entre los días que parecen malos y entre los días que parecen buenos, hay un camino que es muy largo y lento de regreso a casa.  Mientras, pienso en ti, con la música que soliamos escuchar haciendo el amor. En los momentos que estar cerca de ti sentia una calma sabiendo que ahí pertenece mi corazon. Con el vino que endulzaba tus labios y que al besarte sentia electricidad en todo mi cuerpo.

 

Estas noches en mi cama estoy solo con los sueños qué se me esperan con la estúpida mentira qué algún día llamaras o que regresaras o que piensas que partir y dejarme fue un error o volver a escuchar tu voz. Hoy vivo la cruda realidad qué estas lejos, que todo termino, que me cuesta mucho aceptarlo pero aun te extraño y duele tanto... Me dueles tanto.