Reloj,
avanzas y no te detienes
no vacacionas ni descansas.
Tic tac, tic tac,
el sonido elegante de tus pisadas en el tiempo.
Caminas y caminas
siempre sin mirar atrás.
No tienes miedo,
del pasado
ni del futuro,
porque el ahora es tu destino.
Si tan solo me dejaras ser dueño
de un instante y un momento,
así el pasado y el futuro
quedarían en el olvido.