palmerasolitaria

Un mar violeta (Estrofa Julia)

 

 

Como las olas de un mar bravío

entre tormentas,

llega la noche con poderío,

llama a mi puerta,

miro sus ojos con desafío.

      

Mi voz rezuma,

desde mi pecho, rencor y miedo;

cojo mi pluma,

la vieja pluma que es mi sustento,

y entre la bruma

          

pido a la noche que no me lleve;

sin vacilar

hundo mis manos bajo la nieve,

ruego piedad;

y ella me grita que sea breve,

       

que tiene prisa

que mi jugada ya se ha acabado, 

que en la otra orilla

me espera un astro tierno y dorado

con perspectivas

      

a mundos nuevos por descubrir

a un mar violeta,

a un cielo eterno color marfil

donde el poeta

empapa su pluma en la matriz.

 

“¡Rápido noche

llévame pronto, es mi ocasión!

da igual a donde

mira que estalla mi corazón,

no te demores.

 

Que ya ando presta para este trance,

en mi equipaje 

guardo promesas de un nuevo lance,

y en mis andares

forjo los versos de algún romance”.