De qué sirve una puerta que no se abre.
De qué sirve un reloj que no camina.
Parecería tonto:
una escuela sin niños;
un cuartel sin soldados;
un hospital sin doctores;
una pistola inocente, sin balas,
que jamás ha disparado
ni con balas de salva, sin ruido...
Y así pudieran llenarse
páginas que no dicen nada:
un libro que nadie ha leído;
un espejo en el que nunca se han mirado;
una montaña que jamás han escalado;
y hasta un poema sin alas,
escrito por un poeta desconocido,
para una amada que nunca supo que era amada,
que murió virgen, anciana e ignorada,
en el cajón del olvido...
Frank Calle (16/ marzo/ 2024)