Siento las tardes de nostalgia profunda,
Crepúsculo, cambia tonos al horizonte,
La luna, por el firmamento vagabunda,
Silente el rastro, de mi princesa esconde.
Señales mi mente, trata de encontrar,
Pues la luna, ya no es mi confidente,
Obstinada va, a mis consultas ignorar,
Desatiende incluso, que de mi princesa cuente.
Dijo no enviar, mas misivas a esa estrella,
Que caso tiene hacerla más sufrir,
Y esque sabe, del dolor causante de ella,
Pues le prometí amor eterno, aún morir.