Qué podemos hacer
con el tiempo que nos quitaron
La pasión desierta
la piel fuera de tono
Sin trino propio
Sin ecos de fe
Capaces de subyugarnos
A pesar de los cambios del celaje
Empeñado en hacernos tragar las profecías
A pesar de las dudas del pecho
Piedras y más piedras
Murmuran sin descanso
Pongo los pies sobre la tierra
Lanzo el grito
Y la respuesta se convierte en eco
Un eco fingido
Sin sosiego
De tantas noches agrietadas
Cuando no conocíamos la enciclopedia
De la vida
Y nos bastaba pasear por el Embarcadero
Y mientras yo atrapaba cangrejitos
Tú me ahuyentabas la tormenta
Nunca olvidaré tus ojos claros
Mirándome
Sin pudores ni mentiras
Y a pesar de que el cielo no tenía luz
Continuábamos cabalgando
Sobre nuestros talones
Metiendo las piernas en la arena
Quizás nadie recuerde
Aquellos años
Ni tu bicicleta azul
Ni siquiera como lloraba
Esperando tu regreso
Mucho menos
Que éramos dos en uno
Y que, aunque los siglos pasaron
Nunca murió la humedad de tus labios
Ni los míos
Nadie pudo evitar
Que buscáramos un orificio
Para lograr una escena perfecta
Sin rubor
Ni miradas indiscretas
Y volvimos a amarnos
Enlazando la voz
Liberados
Línea a línea
Hasta el fatídico día
Donde
Tras uno de los silencios
Mas extasiados
Abriste las alas
Lanzándome un adiós
Bajo el cortejo más solitario
De una noche de invierno
Dejándome atónita
Abrazada al silencio