jvnavarro

ENTRE PALMEOS CANTANDO

 Una canción triste 

que se rompe en un llanto,

la voz ya gemido

y el gemido ya canto

en la soledad 

de un escenario,

con una silla que sirve 

para sentarse golpeando

con los tacones el suelo del tablao,

ya las manos de frío temblando.

 

La noche lleva sueños,

lleva duendes 

que se van deslizando,

desde la laringe a la boca 

y desde esta a los labios.

 

Una colilla en el cenicero,

una copa marca el rato

que lleva aquella pareja 

de enamorados

lamiendo que si el cigarro, 

que si la copa,

que si la canción, 

que si los besos, 

que si los buenos ratos,

en que el amor cae presa 

de quienes se sienten

 ellos dos embrujados.

 

Todo es en aquel viejo tablao,

en una calle llena

de gitanos y payos,

flamenco genuino 

y amores de antaño,

que el ambiente alborotado

 saca del fondo de los armarios

y es que tan solo hablamos,

de la belleza de la noche

para cuando se le atiende

 amando y cantando.