EN EL MOMENTO PRECISO
Tan solo de vez en cuando
llega la brisa del mar
y hay quien se pasa esperando
ver a una estrella fugaz.
E inmerso en su oscuridad
del céfiro no disfruta
y de ello suele culpar
a tener mala fortuna.
Es experto en dar excusas
y siempre busca villanos
para liberar sus culpas
mientras se cruza de brazos.
A la brisa la ha ignorado
y si hay estrellas fugaces
tampoco las ha mirado
al pensar que son triviales.
Cada quien con su equipaje
¿Qué cosas yo no veré?
De mi falta de carácter
a quiénes los culparé.
Hoy que ya entré en la vejez
recuerdo brisas y estrellas
que sin más las desprecié
y que ahora... Ya no llegan.
…