En el acaecer de la vida
lo enigmático es el hado;
sagaz, impasible, malvado
tiene en sus garras las bridas.
O, le da un giro y la tiene asida
con un suceso inesperado,
y en un mundo idealizado
a la visión y fantasía convida.
Con los altibajos es flexible,
así como en el nacer… y morir
que, penden de su hilo invisible.
La vida es un as impredecible,
frente a lo que le ha de ocurrir
brilla con tesón, o es vulnerable.