Yo también te recuerdo
en ese futuro de almendras
que un día demolimos.
Yo te recordaré
porque ya estuve en tu presente
un día cualquiera que hoy huele
a tiempo de nueces pretéritas.
Yo te he recordado
por tiempos y tiempos
pues aquel día
que sería un futuro
llegó, y hoy envejecemos
desde ese campo tan nuestro
que se aleja en la semilla trasegada…