Eres luminoso sol
entre un mundo tenebroso,
ese jardín tan frondoso
dentro de mi corazón;
lucero en el arrebol,
esperanza en lo escabroso,
silencio en el bullicioso:
reino de toda ilusión;
eres el principio y fin,
dulce pastor del amor:
vida, camino y verdad;
dueño de todo el confín,
un eterno resplandor:
fuente de felicidad...