Ámame desnuda,
ámame vestida.
Ámame seca y mojada.
Ámame de la cintura
para abajo y para arriba.
Ámame descalza.
Ámame también mordida,
ámame con la boca abierta
y con la boca cerrada.
Ámame gritando en silencio,
ámame con calma y con prisa.
Ámame como si jamás
hubieras amado
y ámame con la rutina
de todos los días.
Ámame hasta morir amando
y ámame para renacer en tus entrañas.
Ámame tibio de besos y heridas.
Ámame de noche bajo las estrellas
y vuelve a amarme mañana,
cuando la luz de amor te sonría
como leche hecha agua.