No se escribir más versos con tu nombre
todo mi ingenio en ti se ha consumido,
mi musa fuiste en el Parnaso huido,
ya no es tu voz destello que me alumbre.
No se buscar tu nombre en el complejo
bazar de las palabras y su encanto,
tu nombre olvido ante el papel en blanco
cuando te añoro desnuda ante el espejo.
No soy, amor, rehén por ti cautivo,
mi libertad pregona otro paisaje,
ya no concibo mi tiempo acobardado,
no ocuparás lugar en mi bagaje:
No poder definirte con palabras
es comprender que nunca has existido.