En un reino olvidado,
bajo el manto estelar,
una dama de magia
comenzó a caminar
con sus ojos de luna
y cabello de mar.
Oh, Morgana le Fay,
hechicera sin par.
Oh, Morgana, en tus manos
resplandece el poder
de los vientos, las sombras,
del amor y el temer.
En la tierra de Avalon,
lugar de renacer,
tu nombre suena en eco
de cada atardecer.
Rodeada de bruma,
el destino en su ser,
con sus conjuros teje
la historia y el poder.
Amores y traiciones...
su leyenda creció,
y horadado en el tiempo,
su nombre se grabó.
Oh, Morgana, en tus manos
resplandece el poder
de los vientos, las sombras,
del amor y el temer.
En la tierra de Avalon,
lugar de renacer,
tu nombre suena en eco
de cada atardecer.
Ella por muchos es temida,
tantos más la han buscado amar,
Morgan le Fay, en su misterio,
siempre libre supo vagar.
Oh, Morgana, en tus manos
resplandece el poder
de los vientos, las sombras,
del amor y el temer.
En la tierra de Avalon,
lugar de renacer,
tu nombre suena en eco
de cada atardecer.
Porque en cada historia y leyenda
que cantan bardos en canción,
su espíritu vivirá siempre...
desafiando nuestra razón.