Por que triunfes, hijo mío
le pido al sol, brille más;
lo mohíno del umbrío
no pinte nunca tu faz.
Que no se quiebre el camino
por donde debas pisar.
Nunca el miedo al desatino
impida tu caminar.
El tropiezo es solo piedra;
que al tropezar, desvanece
cuando en tu camino medra
la experiencia que te crece.
Que el éxito te sonría
sin que su niebla te cegue.
No exista luna sombría
que sin amor, a ti llegue.
Nadie es perfecto, hijo mío;
que el yerro no te condene...
¡Nadie gime más que el río
y su curso no detiene!
EmitzaSR🇨🇺