(Décimas endecasílabas)
Ha vagado entre luces del olvido
manojos de quimeras de algún sueño
que ya escondidas bajo adusto ceño
de insidia lisonjera fue vestido.
Navegó en su último latido
tal como ave que herida en el costado
elevando las alas que ha varado
encontró su pasado y hoy se eleva
Y nuevamente al anhelo subleva
late su corazón ilusionado.
Late su corazón ilusionado
como antaño, hoy viste de primavera
su cómplice y amiga la lumbrera
desde lo alto la mira con agrado.
Y un lucero del cielo le ha bajado
con un pacto que entrega y consolida
sanando con ello la vieja herida
bajo el manto de un cielo destellante.
Vuelve a cantar la vidriera, triunfante
orgullosa de amor sigue vestida.
Autora: Ma. Gloria Carreón Zapata.