Cómo has podido destino
matar con sucia arrogancia
un amor que con fragancia
para hacerme dichosa vino.
Cómo has podido destino
con ausencia de justicia
matar a cada caricia
que me daba placer divino.
No quieres responder nada
sobre esta triste encrucijada
en la que tú me metiste.
Es claro que mucho mentiste
y que una trampa tendiste
en la que sigo atrapada.
Amelia Suárez Oquendo
13/04/2024