Amo la intensidad
con que pronuncias tus palabras
y las transformas en emociones
que no marchitan ni se apagan.
Esa feminidad
me provoca con su llama,
no teme sentir,
llorar por quien ama.
Grita, corre y canta
no compares tus sensaciones
con el vacío de la nada,
Te escucha ese amigo escriba
que cada lágrima relata
como flor de tu saliva.