La muerte, la que recorre el aire
la sombra que recorre la tierra,
una rima escrita por nadie
un amor que a besar no llega.
Un sueño que ya ha despertado
una lágrima convertida en pena,
un te quiero que se ha callado
una noche sin luna ni estrellas.
Un soldado que busca su gloria
un misterio que cierra sus puertas,
un recuerdo jugando en la memoria
un verso que se bebe a sus letras.
Un creyente rezando a su dios
un dios sobre una cruz de madera,
una joven soñando con su amor
un pájaro sin alas que ya no vuela.
Vida y muerte en su propia lucha
por una muerte, una vida que llega.
Y en el complejo mar de dudas
¡La verdad que distingue a un poeta!