La verdad de todo, ¡de tantas cosas!,
cada cosa tiene un particular
punto para ver la realidad,
una realidad, no se ve así,
no se siente así en el mismo lugar,
¿Por qué aunque pudiéramos coincidir
no veo la forma de compartir
y alinear la mirada extraviada
que busca encontrar en las hondonadas
el mismo pensar y el mismo sentir
debajo de una sola llamarada?.
Confusión, simple confusión llana
entender una certeza, y también
con la misma certeza conocer
lo que no ha sido y no será jamás,
no importa lo que se quisiera ser,
lo que es, és, y lo que no es, no será,
más allá de lo que quiera imaginar
lo que existe es a la verdad acorde
y lo que no, aunque mi mente acomode,
jamás a caprichos se acoplará
pues todo el universo tiene un orden.
Es por tanto imposible tal desorden,
que no preciso de sabiduría
para hallar en las grietas de la vida
primera verdad y clara certeza
anterior a cualquier filosofía.
La primera es inocente rareza
que mora en las núbiles primaveras;
la segunda se encuentra entre los centros
traspasada por gozos y tormentos;
lejana y misteriosa es la tercera
que irremediable exige su derecho.
Capullo y retoño de cualquier verso,
esa primera e inocente rareza
que mora en las núbiles primaveras;
milagro que sublime va animando
al que existir es su naturaleza
y que detenta su vívida esencia
en Certeza de nacer y vivir
y al menos por un instante sentir
las maravillas que abundan doquiera
comenzando su propio devenir.
Tórridos flujos de vida y sentir,
segunda certeza que en hondos centros
es traspasada por gozo y tormento
lógico fruto del vivir humano,
que tajante separa sin remedio
a todo lo que haya sido creado
y en honrada encomienda fue entregado
para nuestro mayor goce y disfrute,
así la Certeza del Amor fluye
en pasiones y afectos entregados
y altivas trascendencias que discurren.
Finalmente, en el lugar que recurre
menciono el colofón de las certezas,
lejana y misteriosa es la tercera
que irremediable exige su derecho
de llegar intempestiva y artera
en el tiempo en que a bien tenga quererlo,
reclamando lo que es suyo en derecho
y desde inicio se le ha prometido:
\"Tú acompañas el final recorrido
que la vida y el amor hayan hecho
capitulando todo por cumplido.\"