FIDEL HERNANDEZ

Hoy ya no es el ayer

 

Ya no me queda cuerpo.

Se me fue desmembrando

persiguiendo tu estela.

Ya no me queda cuerpo;

se me fue cercenando

con tu hiriente indiferencia.

 

… y ahora vuelves tu mirada hacia mí;

cambias tu corazón por una sonrisa,

intentas embrujarme con esa mirada tan tuya,

intentas también dejar tu equipaje

en el quicio de mi puerta…;

entras despacio, contoneándote;

entras casi desnuda,

vestida sólo de ti misma…

Me seduces, lo confieso;

pero ya no me queda cuerpo…

 

Hoy, ya no me queda cuerpo:

ya no me quedan brazos

para acogerte,

ya no me quedan piernas

para huirte,

y ya no me quedan palabras

para amarte.

 

¿Acaso no intuyes que hoy has llegado tarde, mujer?

¿No te das cuenta de que hoy ya no es el ayer?