Juguemos al 52 y luego 3 con lengua,
Disfrutemos mientras la noche mengua,
Olvidemos todo, solo seamos como el fuego,
Consumamos todo, que no quede ni el ego,
Con el juego previo exploró tu cuerpo morena,
Abriendo tus piernas solo escucha como resuena
Tu felicidad por la habitación, mira como baila,
Riendo junto a ese conjunto de lilaila.
Perdón si lo rompí me deje llevar al ver tu sonrisa,
Quizá llevaba prisa quería que me quitarás la camisa,
Besar tus senos y se nos fue la noción del tiempo.
Me sentía director al dirigir tus gemidos a tempo.
No se cual era la necesidad de hacerlo tan salvaje,
De amarrar tus manos, y ponerte en 4 disfrutar el paisaje,
De hacerlo tan rico para matarnos en la cama
Y revivir a la mañana siguente con el sonido de la alarma.