Esta tierra baldía busca subsanar la interna herida que le ha dejado la desagradecida humanidad.
¿Por qué no nos acabas? ¿Por qué nos permites subyugar a tus ramas vivientes?
¿Cuándo se acabará tu piedad por esta despreciable mancha innecesaria? ¿Por qué buscas sanar poco a poco mientras te siguen dañando por fuera, por dentro, por todos lados?¿Por qué nos tienes por buenos si no lo merecemos?
Acabamos con un susurro abrumador.
En la mañana extermina el pueblo sangriento, sediento de tu sabia interna.
En un abrir y cerrar de ojos, enfríanos, quémamos, pero acabamos.
No te merecemos
tierra baldía huméctate con la sangre perecedera de nuestra extinción
para que retornes a tu espléndida vida antigua.
Acábanos, ámate un poco más en vez de esta desdichada creación.
Acábanos y sana por fin el sofocante humo de nuestra ingratitud.