Pilar Luna

LA VIDA SENCILLA

Necesitaré

un cinturón de asteroides

para agarrarme.

Las tijeras de la costura

no están bien afiladas.

Frente al espejo,

cuatro tijeretazos

y me corto el pelo,

siempre crece.

La suerte está a mi favor,

el sol me mira y sonríe.

Nada esperan

y a las flores del campo

las lava el rocío.

Los olores del ambiente

inspiran estas palabras,

una frágil sonrisa floral,

jazmines, azahar y rosas,

un perfume apropiado

en la celosía

irradia los aires de al-Ándalus.

El eterno femenino

trae el viento de la primavera,

preparo el abanico,

la fascinación sin sortilegios

para los días más largos.

La simplicidad llena el espacio.