Caminos que se cruzaban,
donde el barro habia hecho su nido.
Lo vivido no se pierde.
Los hijos evitan el olvido.
Dios permanece.
Entre piedras de la muralla
germinaron libros.
Los errores del pasado
no debieran repetirse,
para evitar un presente maldito.
El futuro, sueños por estrenar.
Vivir es una noria.
Se vuelve al principio
para seguir avanzando:
¡Descalzos!
El rencor es el peor veneno.
Solo el perdon cura
las heridas del tiempo.
Tras el invierno
llega siempre la primavera,
que nos recuerda:
\"seguimos vivos\".