Con pasos sigilosos me encamino,
hacía un nuevo destino muy lejano.
Pretendo creer que ya he aprendido,
deseo olvidar cuento he llorado.
Como mosca vuelo entre las cosas,
buscando las más apetitosas.
Que llenen a mí ser deshabitado
de sueños, ilusiones, nuevas cosas.
Ya no vuelo muy alto pues procuro,
ya no caer en redes de amores falsos.
Quiero algo diferente pues me aburro
como una rana salgo dando saltos.
Y escapo de las garras del amor,
que me quiere engañar con ser mi amigo.
Me ofrece su techo y su calor
pero yo solo sordo hago mi oído.
Levanto mi vuelo nuevamente,
pues ya no quiero ser otro gusano.
El capullo por fin he destrozado
mis alas están listas para el cielo.
Miles de horizontes me esperan
miles de noches y días.
Nuevas tierras, nuevos mares
más placeres y alegrías.
Del renglón no quitó el dedo
porque aún tinta me queda.
Yo solo floto en el aire
como una pluma viajera.
O como aquél gorrión
que canta en la pradera.
Que solo sabe ser libre
y que no sabe de guerra.
Que no sabe de nostalgia
de amor o melancolía.
Que no sabe de notas
mucho menos melodías