José Luis Barrientos León

Recuérdame

 

Recuérdame cuando ya no puedas mirarme a los ojos

Y sientas que respiras dentro del miedo

cuando tu mano haya perdido el tacto

y la ausencia te inunda de lágrimas

como si lloraras mares invisibles

y las sonrisas se hundieron en la tierra

llevándote al fondo de la nada

 

Recuérdame, como la mariposa que no tuvo ruta

porque el volar solo tenía sentido sobre tu cabeza

y el existir no era encontrarme en un lugar

sino mi forma de sentir y de amar

y el destino no me lo marcaba una brújula

sino el latido y la entrega de mí mismo

 

Recuérdame, como si te abrazara la misma ilusión cada mañana

y al cerrar los ojos, vieras la fuente cristalina del amor

resplandecer e iluminar tu camino

podrás caminar a través de las sombras

desvaneciendo la soledad

sin temor a los recodos o las esquinas sombrías

 

Recuérdame, porque yo estaré contigo

soplando bajo tus alas,

para hacerte volar con tus sueños

y vencerás la montaña superando el frío

atravesarás los desiertos, acallarás el ruido

Izarás las velas, surcaras raudo los mares

reposaras en arenas, cantarás manantiales

relucirás cual estrella

Aunque yo me haya ido.