Llegaste a mí cuando más lo necesitaba,
Fuiste la tabla de salvación de mi soledad,
La tristeza que de mi interior se apoderaba
Gracias a tu compañía la convertías en felicidad,
Eras un alma independiente y eso me gustaba,
Soñaba con tener una familia y tenía tu lealtad,
Nadie más que tú sabía lo que me atormentaba,
Eras mi confidente y me proporcionaste estabilidad,
A escondidas te colabas en mi habitación y me encantaba,
Era ese nuestro secreto y también nuestra realidad,
Fuiste para mí esa amiga que tanto ansiaba,
Todavía te recuerdo y me llena de felicidad.