Hay una realidad externa fuera de mi, una realidad que anhelo, que deseo y que un momento deje escapar.
Es una clase de libertad que no puedo acceder con facilidad, tengo las puertas abiertas pero no quiero salir. Dentro de esa realidad estas vos, que me miras tierna-mente y a le vez desafiante, esperándome verme saltar, buscando saber mas de mí, pero nunca vas a poder ver mas de este fantasma que te puedo mostrar, nunca veras mas que mi sombra pasar.
Dentro de tu anhelo hay un deseo insaciable que nunca podrás cumplir. Y dentro de ese deseo se encuentra mi libertad.
Tus ojos son el cielo y mis ojos son el sendero que da paso a lo que nunca vamos a tocar: nuestra pulsión de recibir y entregar lo que sentimos.