Y de bajo de este cielo nublado, lloviendo, respirando el aroma a tierra mojada, viendo infinidades de recuerdos, memorando aquellos días en donde me ahoga la melancolía, sufriendo en aquel desdén un suplicio tormentoso que no me deja, que no me hace mantener la calma.
Hoy triste la mañana, triste el sentido de mis sentimientos, pues el ensordecedor soneto del silencio carcome lentamente mi alma, rasgando tan lento este palpitar que siento ir perdiendo, donde mis pulsaciones se vuelven suaves, más rígidas, más sin sentido común.
En este día de abril, se abre un paso más al arrebato de locura, a la de una conciencia que ya no razona, la de un sentimiento que parece haber muerto, que parece ser arrastrado por las aguas de un río crecido, sin estanque, sin rumbo.
De bajo de este cielo lluvioso, voy abandonado uno a uno cada recuerdo, cada sufrir; lloro mientras el cielo acompaña mi cantar silencioso, lloro mientras los estruendos silencian a este corazón que se ahorca solo, que se desvanece lentamente con el pasar de los días.
Henry Ruiz
29 DE ABRIL 2024
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