Cansadas primaveras,
muchos veranos,
otro día que amanece,
otro nuevo cumpleaños,
nueva arruga en la frente,
otra noche, otro sol.
Nunca la vida espera,
camina sin detenerse,
crece la esperanza,
nueva fe e ilusión,
horas andantes
en el reloj.
Es el mañana
tiempo de ayer
cuando lo pasas
y lo abandonas
a la merced
del tiempo ya agotado.
Vivir aprendiendo
del mundo su voluntad,
de lo malo,
de lo bueno,
del sufrir y del gozar
con los pasos del momento.
Sienes altivas
de nieve blanca,
mirada viva,
gastadas manos,
todo parece
cerca o lejano.
¡Tanta edad!
¡Tanto conocimiento!
es camino del altar
con flores que son recuerdos
para ti
que ya eres viejo.