jvnavarro
ASÍ UN POEMA COMIENZA Y TERMINA
Rompe que rompe y rima que rima
sale que sale el sol se anima.
Un día de flores y otro de sonrisas,
mil días de lloros y otros mil de alegrías.
Así un poema comienza,
así el se llena de vivas,
¡Viva la Pepa! (1)
y ¡Viva san Isidro Labrador y Viva la Felipa! (2)
Viva el corazón que arde
mientras dos amantes se acarician.
Y es verdad que desde esta orilla,
ni apartada
ni ella en mis ojos diluida,
se ven los amaneceres
salir en medio de los clarores
que en los cielos germinan
para cuando la luna se retira.
Gloría a lo más sublime,
¡Gloría a la poesía!
Gloria a todo lo que se ve
para cuando uno mira
y observa que sin más pedir,
con solo abrir los ojos
y sentir una ligera brisa
la vida nace
y a nuestros pies se arrodilla,
para que hagamos con ella
aquello que ella con nosotros
de forma amorosa
y con galantería haría.
(1) Viva la Pepa: A esta primera Constitución española se la conoció popularmente como “Pepa”, porque fue sancionada el día de San José (el padre de Jesús) y sabido es que, a todos los llamados José se les apoda “Pepe”. En aquel entonces, la gente salió a las calles a festejar y gritar eufórica: “¡Viva la Pepa!”
(2) San Isidro Labrador: San Isidro, patrón de la capital española. La Felipa: Con una gran laguna de aguas cristalinas de 600 hectáreas, la Reserva Natural Laguna La Felipa es uno de los rincones naturales más preservados en Córdoba.